miércoles, 6 de febrero de 2008

... =(



There he was, sitting in the train, timidly looking around, and writing; a never-ending love letter, a story, his memoirs?
No one in the train could know what it was, as only he felt the words endlessly drifting through his pen onto the worn-out pages of a block of paper. What could be making him write so much, and cry bitter tears as he did so? Could he have been abandoned by the love of his life? Could he be sufferening from a terrible illness? None of us around him knew, as he was a stranger to all of us. But could those people in his life he kept dear and near know what was tormenting him so much?
I looked around and realized that nobody was paying attention to him, only I was entranced and captivated by this young man, who seemed so nice and was so well dressed, and yet looked so sad.
The train soon arrived to destination. I tried to put thinking about this guy behind, but I could not. And sadly, on my way back from work, when I arrived at the station to take the train back home, I heard some terrible news: this young man, the one whom I had felt sorry for, who had caused worry in me although I didn't know him, had jumped under a speeding train and met with an awful death. I also heard that a suicide letter, explaining why he had done it, was found in his back-pack, written down in a block of worn-out papers.
I felt sick, I felt angry and I felt impotent, because if I had started a conversation with him, seeing how much anguish he was in, instead of trying to understand him in silence, I might have been able to make a difference in his life. But I hadn't, and it was too late for regrets.
I didn't stay around to find out why he had done it. I couldn't bear the pain of having done nothing. But how could I have known, if he was a stranger to me and I did not have this special connection with him to be able to know that he was desperately in need? Thinking there was something wrong when I first saw him could have been a trick of my imagination... and I wish it had been. Now it is too late.


Ahí estaba, sentado en el tren, mirando a su alrededor tímidamente, y escribiendo; una larguísima carta de amor, una historia, sus memorias?
Nadie en el tren podría saberlo, ya que sólo él sentía cómo las palabras fluían sin parar de su lapicera sobre un block de hojas gastadas. Qué lo estaría haciendo escribir tanto mientras que lloraba lágrimas amargas? Podría ser que lo había abandonado el amor de su vida? Podría estar sufriendo una terrible enfermedad? Ninguno de los que estábamos ahí lo sabíamos, ya que era un desconocido para nosotros. pero quizás aquellos que él amaba podrían saber qué lo estaba atormentando tanto?
Miré a mi alrededor, y noté que nadie le estaba prestando atención, sólo yo estaba como hipnotizada por este hombre tan joven, que parecía tan bueno y estaba tan bien vestido, y sin embargo se veía tan triste.
El tren pronto llegó a destino, y traté de dejar de pensar en él, pero no pude. Y tristemente, camino de regreso del trabajo, cuando estaba por tomar el tren de vuelta a casa, escuché una noticia terrible: este muchacho, el que me había dado pena, el que había hecho que me preocupara aún sin conocerlo, se había arrojado a las vías frente a un tren que venía a alta velocidad, encontrando su muerte. También escuché que había dejado una carta, explicando el por qué de su decisión, escrita en unas hojas gastadas de un block.
Me sentí mal, estaba enojada y sentía impotencia, porque si hubiera empezado una conversación con él, viendo lo angustiado que estaba, en lugar de tratar de entenderlo en silencio, quizás podría haber hecho una diferencia en su vida. Pero no lo había hecho y ahora era tarde para arrepentimientos.
No me quedé para averiguar por qué lo había hecho. No podía soportar el dolor de no haber hecho nada. Pero cómo podría haberlo sabido, si era un desconocido y yo no tenía con él esa conexión especial que tengo con aquellos que amo, como para saber que estaba desesperado? El pensar que había algo muy mal con él cuando apenas lo ví podría haber sido un truco de mi imaginación... Y deseo que así hubiera sido. Ahora es demasiado tarde.

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Ay gorda! No te puedo creer! pero sabes que? Vos igual no habrias podido hacer nada... era una decision que dudo que alguien hubiera podido cambiar. Y por favor dejá de cargar a cuestas con todas las almas desauciadas que encontras por ahi, querés? No sos la madre Teresa, así que viví tu vida y se feliz. Sabes que te lo mereces, porque vales oro! Te quiero mucho, nena!!!!

Veroka dijo...

Que experiencia...pero es cierto , si él ya estaba decidido nada lo iba a hacer torcer su rumbo...
Un beso

Maria Andrea dijo...

Como podias saberlo, Jean? Imagino como te habrias sentido pero esa fue su decision, quizas desde cuanto tiempo la tenia en la cabeza, nadie la podria haber cambiado. Besote

Jean dijo...

Gracias Loló! Sé que no hubiera podido hacer nada, pero el sabor amargo te queda igual, no? Y no soy la Madre Teresa!!! pero qué hago para no ser tan sensible??? Yo tb te quiero!

Hola Vero! la verdad, una experiencia de mierda! Gracias por siempre pasar por acá! =)

Andrea, vos lo dijiste... nunca podría haberlo sabido. besos!!

Anónimo dijo...

Gorda, las dos sabemos cuánta gente desesperada hay ahí afuera, que no tiene la contención ni la comprensión de sus seres más queridos. Y no hay nada que podamos hacer al respecto. Tenemos la suerte de amar y ser amadas, y vos NO podías hacer nada. Besos.

Jean dijo...

Sí, Clara, lo sé... gracias por ser una de las que siempre me contiene! Te quiero mucho!

Ani. dijo...

HaY Jean, todavia no puedo creer lo que estas contando que triste debe haber estado este muchacho, para tomar esa desicion, se que uno aveces esta desesperado pero tambien estoy aprendiendo que las cosas en parte tienen solucion, y ya entiendo como te sentis cuando te digo que me quiero morir, o que pienso en hacer algo, pero se que no es la salida, y se que tenes esa persepcion de detectar cuando alguien esta mal, pero en esta oportunidad no hubieras podido hacer nada.
Te quiero mucho Jeani.

Jean dijo...

Sí Ani, me dió mucha pena... por eso ayer no estaba muy metida en el entrenamiento. Y me parece bárbaro que estés aprendiendo a manejar las situaciones. Nadie dijo que crecer o vivir fuera fácil, no? A veces ser tan perceptiva hace que las cosas duelan mucho más... Yo también te quiero mucho!

La Colo dijo...

que triste, por favor...

Jean dijo...

Hola Kolo!!! Qué alegría verte por mi blog después de tanto tiempo!!
Y sí... muy triste... y yo que soy una esponja y absorbo todo... es terrible! Gracias por pasar! Me alegraste la noche! =)

Sandra Rubio dijo...

hola Jean. Después de ver los comentarios tan lindos en casa de kolo y de zeta decidí a pasarme por aquí. Y me encuentro con esto terrible que te cuentas. Que lástima de muchacho. Pero no podías saberlo, eso es imposible. Lo mismo, incluso, si le hubieras hablado no cambiariara nada.
Recibe un abrazo...(a veces la vida nos da estos golpes, incomprensibles)

Anónimo dijo...

Hola Jean... muy triste, pero lo iba leyendo y paracía sacado de una novela, pero por los comentarios que leo fue cierto... imagino tu impotencia y tus replanteos ahora...Un abrazo.

Jean dijo...

Sandra, un gusto que hayas pasado por mi blog a través del de zata y Kolo. Y como decís, a veces la vida nos da estos golpes pero hay que seguir. Gracias por leerme y espero veret seguido. Un abrazo!

Marina!! Es verdad lo que pasó, pero quizás mi forma novelesca de contarlo, porque fue muy fuerte, haya hecho que pareciera algo imaginado. Ojalá lo hubiera sido. besos!

Anónimo dijo...

Oh Jean, this is so sad! But I am sure that there was nothing you could do for this man.

Jean dijo...

Maybe not, Karen, but the doubt of not knowing is what bothers, as I did nothing to find out.