martes, 23 de febrero de 2010

El egoísmo


Uffff.. estoy últimamente haciendo mucha introspección... y salen temas como los de mis últimos posts... la sinceridad, cómo hay quienes usan a las personas que entran en su vida, aprender a decir que no... 
Y ahora es el turno del egoísmo...
Porque lo veo continuamente a mi alrededor. Y muchas veces me cuestiono por qué las personas se han vuelto tan egoístas. Esta sociedad en la que hoy estamos inmersos, que se ha vuelto una sociedad de consumo en la que todo se tira cuando ya no nos sirve (tanto las cosas como las personas), ha hecho que los valores con los cuales nos criaron estén cada vez más en desuso.
Así, la mayoría de las personas persigue ideales y objetivos egoístas... van tras lo que necesitan, quieren, se les antoja... sin medir la consecuencia de sus actos... porque no importa si en esa persecusión, se lastima a los que están en su vida.
Y así, están por ejemplo vos, y vos... y quizás vos también... que siempre ponés primero lo que necesitás vos... no importa lo que yo quiera... no importa lo que habíamos acordado... siempre está primero lo que se te antoja en un momento determinado... y siempre naturalmente dejás la puerta abierta. (El típico caso del que ni come ni deja comer??)
Pero nunca hablás claro, todo es a medias tintas, sólo das lo que vos considerás es suficiente información... pero nunca cerrás la puerta del todo, esquivás mis preguntas y en muchos casos los tomás como cuestionamientos celosos, como histeriqueadas... pero jamás dejás vos de cuestionarme e histeriquearme a mí... y muchas veces me pregunto por qué lo permito... y la respuesta es ... porque para mí sos importante...
Todos los que entran a mi vida, a los que YO les permito formar parte de mi día a día, están ahí porque los quiero, porque son importantes, porque me interesan... pero no con un fin egoísta... ya que suelo dar y dar y dar... y no pido nada a cambio.
Esto es justamente lo opuesto al egoísmo... sé que aún quedamos algunos casos raros de gente como yo... los que nos brindamos en nuestras relaciones (y vale la pena volver a aclarar que me refiero a TODAS las relaciones que pueda uno tener en su vida)... escuchamos, contenemos, queremos, amamos, comprendemos, cobijamos, toleramos, aceptamos, nos adaptamos... 
Y tengo la fortuna de poder contar con personas así en mi vida... los podría nombrar a todos, pero por las dudas no quiero poner en evidencia a ninguno... jeje
Me gusta ser así como soy... me hace bien brindarme, me llena escucharte y mimarte al hacerlo... me enorgullece no juzgarte y saber que te pone feliz que estemos en contacto... Y a los que son tan egoístas para ni siquiera poder ver y valorar esto... qué pena!!!  No tienen idea de lo que se pierden... porque esa sensación de plenitud que siento al escucharte, al saberte presente y saberme importante en tu vida (a pesar del caos en el que te encuentres... siempre te hacés de un rato para mí... y para compartirte conmigo... a tu manera, a mi manera... a nuestra manera... porque nos aceptamos tal cual somos).... la manera en la que me siento al NO SER EGOÍSTA es maravillosa... y no la cambio por nada... le pese a quien le pese...

2 comentarios:

Vero dijo...

Yo tampoco soy una persona egoista Jean..soy de dar siempre sin pedir nada a cambio...en TODO tipo de relacion...pero a veces me hago este cuestionamiento..la gente que si lo es...sera feliz?..porque creo que en ciertos momentos,los que damos sin esperar,sentimos en ciertos momentos la necesidad de recibir,al fin y al cabo somos seres humanos,y sufrimos cuando no recibimos una pizquita de nada,y ellos no sufren,porque justamente,no les importa nada..con esto no justifico que sean asi..pero la pregunta a veces ronda en mi cabeza..

Jean dijo...

Vero... realmente creo que cada uno es feliz a su manera... y en general las prsonas egoístas que he conocido son muy felices, porque se van rodeando de las cosas y de las personas que les SIRVEN en los diferentes momentos de su vida...Y por supuesto que de una u otra manera, estamos expectantes a recibir algo por todo lo que damos. No te olvides que nos retro-alimentamos del afecto que recibimos!