Vale la pena...

Cuando volví al mundo bloggeril hace un par de días atrás, el primero que se comunicó conmigo fue Martín. Es amigo mío desde hace mucho más tiempo del que quiero acordarme... éramos tan chicos cuando nos conocimos. Y desde ese día, siempre de una u otra manera hemos estado en la vida del otro... o casi siempre. Tuvimos una muy larga temporada en que nos perdimos el uno del otro...

Y cuando nos volvimos a ver, después de tantísimo tiempo, la alegría y sorpresa en el rostro de Martín eran inigualables, sus ojos brillaban increíblemente, y no podía dejar de moverse y de hablar. Te acordás, Tincho...? Uno salía de la Librería Europea y el otro entraba, haciendo la compra de las interminables listas de materiales que hay que comprar para nuestras princesas a principio de cada año. Fue por pura casualidad, aunque sabés muy bien que no creo en la casualidad sino en la causalidad. Nos chocamos, literalmente hablando, en medio de una vorágine de gente, y ya estábamos a punto de insultarnos, como ya todos hacen hoy en día cuando accidentalmente alguien se tropieza con ellos. Y se nos transformó la cara al reconocernos... es que hacía ya cuánto que no hablábamos ni nos veíamos?? Uffff, una bocha de tiempo!

Y desde ese día, tal como nos había pasado mientras estuvimos en el colegio y por muchos años más, no hemos dejado de estar en contacto... por el MSN, por teléfono, topándonos "por casualidad" en Las Lomitas o alrededores, el facebook... y ahora también en el mundo de los blogs.
Ahora bien... cualquiera que esté leyendo este post se estará preguntando qué tiene que ver esto con el "Vale la pena..." del título de esta entrada. Y es muy sencillo. Creo que vale la pena leer lo maravilloso que es mi amigo de toda la vida, alguien que a pesar de querer dar la imagen de tipo rudo, que está en contra de todo tipo de demostración de afecto o de sensibilidad; un hombre que las pasó jodidas muchas veces y que por eso usa esa pantalla o se pone la piel del personaje de transgresor porque así no tiene que dejar ver su verdadero YO... ese Martín que pueden llegar a pensar que está detrás de la dirección de blog que incluyo a continuación, un tipo feo, satánico, frío... no es así para nada!!!

Los invito a que se den una vuelta por su blog y que descubran los poemas que escribe... y después díganme si una persona falta de sentimientos, un tipo frío y calculador, al que no le importa el qué dirán y que es un eterno disconforme y antisocial (esa es la imagen que quiere dar, naturalmente)... si es posible que alguien así pueda crear lo que crea, escribir con el alma como lo hace, y hacernos llorar con sus palabras.

Listo Martín... te dije que te iba a poner en evidencia... y lo hice (en realidad usé palabras más como defenestrar o algo así, no? jeje). Porque te quiero, porque sos mi amigo, porque sé cómo sos adentro debajo de esa coraza que usás cada día de tu vida, y porque cuando apenas me leíste, sin necesidad de decirte que había vuelto a mi blog, en seguida escribiste algo en el tuyo para mí... Y simplemente... porque sos Martín!

Acá va la dirección de su blog, por las dudas que cuando la linkeé con el nombre de Martín, no me haya salido bien (sabrán disculpar, pero hace bastante ya que no usaba ese artilugio)

http://1nf3rn013.blogspot.com/