Saber escuchar es bueno y es gratis

Cuántas veces realmente escuchamos cuando nos hablan? Muchos dirán que siempre lo hacen, pero el escuchar es mucho más que prestar atención a lo que nos están diciendo, ya que una parte importante de la escucha activa es la empatía: ese ponernos en el lugar del otro, darse cuenta de lo que podría estar sintiendo la otra persona e intentar comprender qué puede estar necesitando en ese momento.

Al mismo tiempo, la empatía se constituye como una competencia emocional/ social a partir de lo que se aprende en las interacciones habituales propias de la cultura familiar y social en que se ha vivido. De tal forma, las personas que han crecido en ambientes donde las emociones pueden ser nombradas y expresadas, donde se puede llorar tanto como reír, expresar fastidio y también ternura, aprenden a permanecer más en contacto con los propios sentimientos y desarrollan mayor habilidad para interpretar los sentimientos de otras personas.

La empatía es la clave de todo lo que hoy se llama inteligencia emocional o inteligencia social. El ser empáticos nos permite acompañar al otro, contener, establecer relaciones confiables, resolver conflictos, crear ámbitos familiares y laborales más sanos.

El que sabe escuchar, por ende, es aquél que puede ponerse en el lugar del otro al que está escuchando, el que se pone en sintonía en dos sentidos: con lo que le despierta el relato que está escuchando y lo que cree que pudiera estar sintiendo la persona que habla. De esta manera, puedo estar escuchando que alguien me cuenta que le dió mucha bronca determinada actitud de otra persona hacia ella, y esto puede despertar en mí el enojo por saber que esta situación es injusta al mismo tiempo que intento reconocer lo herida que puede sentirse esa persona por esta situación.

Algunos podrán preguntarse por qué se me ocurrió escribir sobre esto, como primer post de este año, luego de tanto tiempo ausente sin escribir nada en mi blog. Y la razón no es una sola: primero podría decir que esto que escribo son algunas de las cosas que acabo de aprender (o quizás sea recordar? o racionalizar?) sobre qué significa escuchar, su importancia, necesidad y ausencia en tantas situaciones de nuestra vida diaria. Otro de los motivos es que estoy en este momento pasando por una etapa difícil, no a nivel personal sino laboral. 

Tengo a este alumno en el colegio, muy conflictivo, siempre metiéndose en problemas y ocasionándolos también, del cual me siento decepcionada. Quiero que quede claro que nunca espero nada a cambio cuando ayudo a los chicos en el colegio, me alcanza y de sobra ver que lo que hablamos, que mis intervenciones, que mi preocupación por ayudarlos e intentar solucionar los conflictos, que mi empatía y el brindarme por completo (quizás aquí está mi errror? en el no saber poner distancia? en el creer que puedo ayudar a todos? que todos quieren que los ayudemos?) den sus frutos, que hayan servido para algo. Pero en este caso no es así. Y mi dolor más grande no pasa tanto por una determinada situación que ocurrió ayer, sino porque no quiero además sentirme decepcionada con los adultos que deben tomar cartas en el asunto. Me preocupa que no me escuchen... que quizás no entiendan que somos un equipo que trabajamos todos a la par... que en este momento la que debe ser escuchada, apoyada, contendida, soy yo...

Es muy difícil poder tomar distancia cuando he sido agredida en forma personal, cuando no me nace alejarme o hacer de cuenta que no pasó nada. Ya sé que soy la adulta en esta situación, que soy la que debe "hacer de cuenta que no pasó nada"?? Es eso lo que debo hacer? O debo plantarme firme en mis convicciones y valores y exigir que se tomen las medidas que deben ser tomadas?

Es un duro momento... hay alguien ahí que me esté escuchando?

Decisiones

Siempre tenemos la posibilidad de decidir qué deseamos hacer en nuestra vida. Hay momentos en que nos puede parecer que las decisiones las están tomando otros por nosotros, pero en estos casos lo que verdaderamente ocurre es que nos resulta más fácil hacer de espectadores de lo que nos está pasando en lugar de tomar el rol de personajes principales. Y esa postura también es una decisión!

Es verdad que muchas veces es difícil decidirnos por tomar tal o cual camino... como ya escribí en alguna otra oportunidad, tomar decisiones no siempre es tan fácil, ya que implica cambios. Cuando decidimos por un nuevo trabajo, estamos decidiendo por dejar la comodidad de la situación actual por el animarnos a más... Cuando decidimos por seguir por tal o cual camino, esto sin dudas implica cambios, pero lo importante es saber que estos cambios son siempre positivos.

Desde hace muchos meses ya que decidí empezar a tomar más decisiones en mi vida... a ser el personaje principal en mi vida. Esto trajo aparejado muchos cambios... tuve que dejar atrás determinadas situaciones para poder enfrentar otras nuevas... y no me arrepiento de nada! Hoy estoy FELIZ trabajando en un nuevo colegio. La decisión de dejar el cole en el que estaba no fue tan fácil... había creado muchos lazos con gente que se tranformaron en importantes en mi vida. Pero pesó más en la balanza mi salud mental y física, y el darme cuenta que irme de un espacio físico no implicaba dejar de lado a las buenas personas con las cuales lo estaba compartiendo.

Y sigo tomando decisiones a cada paso... y me hace bien hacerlo. No sólo estoy feliz, sino que SOY feliz! La vida me ha demostrado que vale la pena jugársela a cada momento por lo que uno siente, por aquellas personas en las que uno cree, por los ideales y valores que tenemos y que hacen a nuestra esencia.

Las decisones implican cambios... no de personalidad, sino cambios externos que hacen que nos vayamos adaptando si van con nuestro sentir y forma de pensar.... y me sigo adaptando, y sigo decidiendo, y continúo creciendo y viviendo mi vida a full!

Por qué....

... será que cuando uno mejor se siente, cuando todo está en orden, dándose como tanto lo deseamos, de pronto pareciera que empiezan a aparecer palos en la rueda?
Están aquellos que nos incitan a seguir hacia adelante, los que nos dicen que la vida continúa y que debemos seguir viviéndola, pero que cuando ven que es justo eso lo que estamos haciendo, empiezan a boicotear cada una de nuestras decisiones y acciones. Y se supone que son los que más nos apoyan e incentivan.
Y somos nosotros los egoístas????
Y también aparecen determinadas cosas que no podemos controlar, que hacen que el brillo de tanta felicidad se vea opacado...
Pero no puedo permitirme sentirme mal por esto, aunque cuesta. Todo siempre se soluciona, de una u otra manera.

Y qué bien...

... se siente cuando vemos que lo que tanto añoramos se nos está dando... cuando aquellas personas que son tan importantes para nosotros, aquellas que se hacen imprescindibles con el paso de los días y de los momentos compartidos, van cobrando presencia en nuestra vida, por propia elección, y no porque se sientan obligadas a hacerlo.
Y también se siente muy bien ir dándonos cuenta que aquello que pensamos, imaginamos, ideamos con una actitud positiva, sabiendo que somos merecedores de que nos ocurra, se va plasmando de a poco en nuestra vida en el día a día, con una sumatoria de buenos momentos, de largas charlas, de muchas risas compartidas, de proyectos en común, de objetivos alcanzables a través de las ganas y el deseo y el saber que se puede y que esto es lo que queremos.
Me encuentro en este momento de mi vida de la mejor manera posible, como hace mucho había deseado estar... Cuántas veces hemos hablado sobre la importancia de desear algo con toda nuestra fuerza, con alma y vida...? Y durante tanto tiempo pensamos que seguir deseándolo era en vano, porque nunca llegaba. Y cuando, de pronto, nos encontramos con que SÍ se nos había otorgado lo que tanto habíamos estado pidiendo y deseando, nos encontramos con que no sabíamos qué hacer con ello. Y sin embargo, pusimos los pies sobre la tierra y descubrimos que éramos merecedores de nuestros sueños.. y desde ahí en más, nos fue mucho más fácil entender por qué estamos en el lugar en que estamos y con la persona que estamos, que en definitiva es lo que tanto habíamos deseado durante toda nuestra vida.
Todo nos llega si sabemos cómo pedirlo... todo sucede si nos proponemos que así sea, si trabajamos para ser siempre fieles a nuestra esencia, a nuestros valores, a lo que somos en lo más profundo de nuestro ser. Y es por eso que nuestros caminos se volvieron a cruzar... porque es lo que tenía que ser.
Como dije en algunos de mis posts anteriores, estoy frente a muchos cambios, todos ellos positivos, a pesar del temor que implica a veces atravesar algunos de ellos, pero sabiendo que siempre es para estar mejor. Algunos de estos cambios se han ido dando paulatinamente... desde hace ya casi 6 meses... y qué bien se siente!!!
Y vamos por más... Y me hace super feliz saber que estás vos acá conmigo, para acompañarme, para seguir bancándome y aconsejándome en el cómo encararlos... dándome la fuerza que sé que tengo, pero que con vos siento potenciada, porque creés en mí.

Primer post del año

Son tantísimas las cosas sobre las cuales me gustaría escribir... porque el año que pasó me dejó con cambios muy positivos en la mochila, esa que cargamos a lo largo del  camino. Hubo momentos duros, otros de tristeza, unos cuantos de muchos estrés... pero el balance general ha sido absolutamente positivo.
Aprendí a valorarme más, a conocerme un poco más de lo que ya me conozco (y lo que falta!). Me rodeé de gente más linda, mejores personas; sigo aprendiendo que la carga de los otros, aunque me ofrezca a ayudar para que les sea más liviana, es la carga de los otros y no mía. Intentaré seguir jugando al hockey, ese deporte tan apasionante que sólo aquellos que lo practicamos y que lo llevamos dentro podemos entender lo que realmente significa; cambio de lugar de trabajo, con todo lo que ello implica: las expectativas por ser respetada profesionalmente como estaba acostumbrada que fuera, el "temor" por lo nuevo aunque sea más de lo mismo ya que seguiré enseñando, otra de mis pasiones; me he propuesto escuchar más a mis hijas, no que no lo hubiera hecho hasta ahora, sino que entiendo que necesitan aún un poco más de espacio para poder expresarse; con este escuchar más naturalmente llegaran algunos límites tan pedidos por ellas... así que está dentro de mis metas para este año intentar ser mejor mamá, algo que se puede seguir mejorando día a día, aprendiendo ellas de mi y yo de ellas, continuamente. Y hay más, muchos más cambios... o adaptaciones, si algunos prefieren llamarlos así.
Pero es un continuo seguir aprendiendo y evolucionando y creciendo... y me queda tanto por andar... y lo mejor es que lo estoy haciendo de la mano de mis hijas... y de esa persona especial que ahora está en mi vida.
Empecé este 2011 de la mejor manera que creo posible: rodeada del afecto de una persona más que especial en mi vida, uno de los tantos cambios a los que hacía alusión, y de su familia.
Pensar que estaba tan nerviosa... y sin embargo fue una noche maravillosa, me hicieron sentir super cómoda en todo momento... y vamos por más!!!

Y se termina el año...

... y cuando eso ocurre, suele suceder que nos ponemos a hacer el balance del año que se está yendo. Sin intención de caer en el común de la gente, y a pedido de Maite (una personita super especial, quién fue mi alumna en el cole allá lejos y hace tiempo, y de quien me enteré que había sido importante para ella y marcado su vida por mi compañia, mi estar, escucharla... algo que me nació hacer y que si tuviera que volver a hacerlo, no lo dudaría ni medio segundo!)... a pedido de Maite, estaba escribiendo, es que me siento frente a mi laptop con intenciones de postear algo que sea distinto a lo que todos hacen... pero me está resultando complicado no caer en lo obvio o escribir lo que todos.
La razón de esto? Pues que fue un año lleno de maravillosas sorpresas, de encuentros, de cambios, de nuevos objetivos y metas... también tuvo lo suyo en lo que respecta a lo negativo. Pero como soy de las que suelen ver lo positivo (siempre veo el bosque detrás del árbol...) en lugar de quedarse en lo negativo de las situaciones o personas, no puedo evitar escribir sobre todo lo bueno que me pasó, que me hizo crecer como persona, que me ayudó a seguir subiendo los peldaños de la escalera de la vida. Pero esta vez, acompañada ... de la mano de alguien maravillosamente genial!!
Siempre he sostenido que NADA  ocurre por casualidad... las diferentes personas que entran en nuestra vida, las diferentes situaciones a las que nos enfrentamos en el día a día, siempre ocurren por algún motivo. Hay quienes lo atribuirán al Destino, otros dirán que es lo que Dios tenía preparado para nosotros luego de nuestros pedidos... pero fuera cual fuere el motivo al que se lo atribuimos, de algo estoy absolutamente segura: siempre todo ocurre por algún motivo, nada es al azar jamás. Porque siempre son nuestras acciones, nuestras ganas o deseos (conscientes o inconscientes), el proponernos metas, lo que pensamos, lo que pedimos... cada una de las cosas que hacemos, decimos, pensamos o sentimos son las que nos llevan a encontrarnos con esas situaciones o personas que nos van moldeando, haciéndonos crecer, aprender, madurar, mejorar, seguir subiendo la escalera de la vida, solos o acompañados, pero siempre mejores y más evolucionados.
En mi caso... y ojo! soy del tipo de persona que suele hacer introspección, intentando mejorar lo que estoy haciendo mal, pero no sólo a fin de año, sino ante las diferentes situaciones que se van presentando y a medida que se van presentando... hoy mirando para atrás, puedo decir que éste ha sido un año lleno de muchísimas cosas lindísimas. Estoy agradecida por haberte vuelto a encontrar después de un cuarto de siglo, y sigo sosteniendo que si pasó, es porque tenía que ser hoy, y no cuando éramos más chicos... adolescentes que, a pesar de tener la misma esencia que tenemos hoy, siendo tan parecidos, con los mismos valores y educación... en aquél momento no estábamos subidos al mismo peldaño ni buscábamos lo mismo... en aquél entonces éramos amigos, y hoy además de amigos, estamos intentando transitar esta segunda mitad de nuestras vidas juntos... y esto me llena de felicidad! Porque es lo que hacía tanto tiempo habíamos estado pidiendo, deseando, buscando sin realmente salir al ruedo para encontrarlo. Porque siempre todo llega... lo que tanto buscamos eventualmente llega a nuestar vida cuando estamos listos para disfrutarlo, para apreciarlo y valorarlo, para hacerlo crecer y mejorar.
Por eso... este ha sido un año espectacularmente especial para mi... y sé que el que viene será aún mejor, porque yendo paso a paso, estamos apostando a seguir estando mejor... así que... 2011, preparate que ahí vamos!!!
Y como suele hacerse, también hay metas y obejtivos que uno se propone al finalizar un año viejo y comenzar el nuevo... y entre ellos están seguir afianzando esto que nos está pasando, seguir apostando y dándole para adelante; cambiar de trabajo, apostando a que todo va a estar mejor y seré valorada profesionalmente; dedicarle más tiempo a mis novelas, inconclusas aún por el trajín diario, pero segura que una buena planificación de mis tiempos me permitirá por fin poder terminarlas, para así poder seguir escribiendo otras (porque las ideas realmente hacen un torbellino en mi cabeza y me bombardean continuamente!) ... y por supuesto, seguir mejorando como persona para poder brindarme más plenamente a los que forman parte de mi vida hoy... y a los que vendrán.
MUY FELIZ COMIENZO DE AÑO PARA TODOS, QUE TODO LO QUE DESEAN Y SE PROPONEN LES SEA CUMPLIDO!!!
Y a acordarse... si pienso en positivo, atraigo lo positivo... me merezco todo lo bueno que me pasa y que estará por pasarme... a seguir pensando en positivo!!!